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sábado, 21 de mayo de 2016

REGRESION DE MEMORIA A VIDAS PASADAS


 Lo último que recuerdo es verme flotar en el aire, mientras un vacio raro en el estomago me invadiapor completo.
Ello cesó por algo peor. Esos hombres todo de negro a quienes no veía su rostro,me llevaban a rastras y sin compasión.
Grité; grité tan fuerte como pude, más la situación empeoraba para mí. Ellos comenzaron a golpearme sin piedad. El dolor ya era inaguantable y me desvanecí.
Desperté en ese lugar oscuro. No veía nada, solo oscuridad y sombras.
Pero sentía, sentía los gritos desgarradores de mis compañeros de celda. Fue ahí cuando me percaté de que mis brazos y tobillos estaban sujetos con cadenas a la pared, como estaqueado.
Sentía mucha sed y hambre. Hacía días que no me daban de comer ni beber. El calor era intenso de día y el frio penetraba mis huesos de noche. Ya había perdido la cuenta de cuanto tiempo llevaba
allí. Dias o meses, no lo sabía. De día se veía una penumbra y algunas siluetas de gente que estaba en mi misma condición.
Eramos varios, todos gritábamos y enloquecíamos a veces al unísono. Era contagioso sentir el dolor.
No se cada cuánto era el castigo, me parecía cada media hora, puesto que la idea para ellos era mantenernos en un constante dolor todo el tiempo. Nos pegaban con palos en las costillas, en riñones, la espalda, la planta de los piés, en todos lados....
Nunca pude ver sus rostros. Vestian como monjes medievales. Usaban capucha y tunicas negras.
Jamás pronunciaban palabra alguna.
Una sola vez recuerdo, nos sacaron de ahí y nos condujeron por un pasillo largo y angosto.
Esa vez pude ver algo, era todo como de madera. Había varios pisos y escaleras. Ibamos encadenados eso si, y todos juntos, uno detras del otro. No podìamos romper la formación.
Llegamos a uno de los pisos altos. Había camas. Nos recostaron ahí. Las sábanas estaban todas ensangrentadas. Las paredes y los pisos también. El olor a la sangre era insoportable.
Rápido me dí cuenta, que eso no era para nada un hospital. Me percaté de ello cuando sentí los primeros gritos desgarradores de mis compañeros. Yo estaba al último. Me desvanecí cuando llegaron a mí. Esperaron que volviera en sí para golpearme. Me molieron a palos literalmente. Mi sangre salpicaba las paredes y los miembros se me inflamaron.
Muchos ya no volvieron de allí. Yo me salvé con unos pocos y bajamos las escaleras con mucho esfuerzo por lo dolorido que estábamos.
Allí por primera vez vi la cara de uno de ellos. Me sonrió, y me dijo..."tranquilo que a vos te van a dar otra oportunidad", pero no te juegues, portate bien cuando salgas, puesto que ya viste lo que les pasó a los otros. Ahí vi recién la carne que pasaba, como en un matadero a
mi costado. Eran restos todavía frescos....
No se en que momento me buscaron, pero me sacaron de ahí. No me dejaban mirarlos.
Solo me conducían del brazo; pero ...ese lugar era calmo recuerdo...y los sentía buenos.
Me sentaron como en una roca. Ellos permanecían a mi lado más no dejaban que los mirase. Como eran amables les pregunté : "¿que hago acá? ; ¿ quienes son ustedes ?"
Solo me respondieron imperativamente:

Ellos: - Mira allí y no preguntes -
yo: - Es la tierra !, mi planeta ! -
Ellos: - Mira más profundamente -
yo: - Es mi madre ! -
Ellos: - Si -
yo - Pero ella me odia ! , por eso la maté ! -
Ellos: - Así es, ...por eso te daremos otra oportunidad...no la desaproveches, ésta vez deberás amarla y cuidarla aunque ella te odie.
Te odiará desde su vientre. Intentará abortarte los primeros meses.
Cuando seas niño te someterá a los más crueles castigos. El hombre que
pondrá la esperma, tu padre, te abandonará bien nazcas.
Serás un niño sin felicidad y te haran trabajar todo el día sin descanso.
No tendrás ni un solo momento de paz ni felicidad, hasta que no hayas
devuelto a tu madre los años de vida que a ella le quitaste.
La asesinaste a los 40 años, y ella debió vivir hasta los 82, o sea que,
recién a los 42 años, se te dará un respiro al sufrimiento.
yo: - Noooooooo !, por favor...Nooooo!, piedad, piedad !, ella me odiaaaa!
NOOOO............

Siento una sensación extrana en mi estómago. Todo se torna raro . Veo un
túnel blanco como un cuerno gigante donde floto en caída, cada vez con
mayor velocidad. Veo la cara de mi padre , de mis hermanos...y aterrizo
suavemente sobre un prado verde. No tengo energía para levantarme,
pero siento la suavidad de la hierba en mi mejilla y veo unas florecitas de
colores violeta y blanco. Una suave brisa me envuelve.
Siento un profundo amor. Mucho amor...Esa sensacion durará poco
me avisan....

Y pronuncian sus ultimas palabras:

Ellos - No podrás recordar nada de todo ésto, solo debes aprender.
Todos los recuerdos de tus vidas pasadas te serán borrados y...
cuando te llegue el momento de regresar deberás responder tres
preguntas:

"¿ Cuánto has aprendido; Cuánto has amado; y Cuánto has dado ?."

............

Este escrito es de mi autoría.
Un fragmento de mi libro inédito, donde trato el tema de regresión de memoria a vidas pasadas.
ZOROASTRO 03/01/2007

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